Grietas y desprendimientos en el hormigón, ¿sabes que puede ser culpa del acero?
El acero es un material que se encuentra en la mayoría de estructuras de los edificios i con el paso del tiempo puede provocar problemas.
Cuando se oxida el acero, se lleva a cabo una reacción química que provoca un cambio del color exterior del metal sin afectar a sus caracterísicas. El contacto del metal con agua y aire hace incrementar la rapidez de la oxidación en el elemento.
Una vez el acero se ha oxidado, el principal problema es que puede corroer, y al contrario que la oxidación, la corrosión si que provoca un cambio en el acero primero ganando sección hasta 9 veces su volumen cosa que puede presionar el hormigón y hacer que se rompa. Una vez expandido su sección disminuye cambiando sus propiedades por las cuales se usa en el hormigón, puede llegar a desaparecer.
¿Que tenemos que hacer si vemos acero deteriorado, grietas o desprendimientos en el hormigón?
Si vemos algún síntoma de una posible afectación del acero o consecuentemente del hormigón de nuestro edificio, informamos a nuestro técnico de cabecera lo más rápido posible, que podrá hacer un estudio técnico de la situación y proponer una mejor solución.