Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo occidental, en la cuales destaca la parada cardiorrespiratoria. En Catalunya, cada año se producen unos 400 casos de aturadas cardiorrespiratorias, de mediana unas 15 diarias. Está demostrado que si se utiliza el desfibrilador en los primeros minutos se incrementa un 60% el índice de supervivencia, justificando así la presencia del dispositivo en nuestro edificio para asistir a personas tanto de dentro como de la calle.
Su utilización es sencilla e intuitiva, el mismo desfibrilador guía al usuario para utilizarlo correctamente. Aunque una formación a los vecinos para la correcta utilización del dispositivo y en técnicas de reanimación es más que recomendable. En caso de mala utilización, ya sea porque no se tratase de una parada cardiorrespiratoria o por mala praxis, no genera efectos adversos a la persona.
En Catalunya existe el Decret 151/2012 que establece requisitos para la instalación y uso de desfibriladores externos fuera del ámbito sanitario i para la autorización de entidades formadoras en este uso. Este decreto establece los requisitos de formación que deben disponer las personas que han de aplicar, preferentemente, la desfibrilación i regula los programas de formación. Nos enseña como notificar delante de la Xarxa d’Oficines de Gestió Empresarial (OGE) de la Generalitat de Catalunya la instalación del aparato y garantizar su posterior mantenimiento y conservación.
¿Queréis instalar un desfibrilador en vuestra finca? El Tècnic de Capçalera os ayudará a escoger el mejor lugar donde colocarlo, procurará una correcta instalación y conseguirá el mejor precio para ayudar a vuestra comunidad.